La gruta fue
descubierta por el sr. Miguel Manzano Lobato, de manera
accidental. Durante la temporada de lluvia (jul-dic) un
arroyo mantenía en perfecto movimiento la maquinaria de
la fábrica de aguardiente de su propiedad; el problema
era la temporada de sequía, durante la cual el nivel del
agua bajaba considerablemente. Al quedarse prácticamente
sin agua, él decidió buscar el venero. Siguió el cauce
del arroyo y encontró el túnel por el cual salía el
agua del interior del monte, y ése fue su primer
obstáculo porque era un pasaje muy estrecho. Él se
encargó de ampliarlo y avanzó lentamente, hasta que se
encontró con un segundo obstáculo: una cascada de siete
metros de altura. Logró subir la cascada y continuó
avanzando: el 19 de marzo de 1919 descubre la bóveda
principal. |